Agustín Mantilla en su laberinto

Agustín Mantilla es un hombre carismático, simpático, con un millón de amigos, dentro y fuera del APRA, amiguero, hasta hace poco recibía los golpes estoicamente, pero ha explotado, la razón : ha sentido la fría espada de la deslealtad y la infraternidad de los “compañeros”, principalmente de la cúpula aprista y de los que disfrutan del poder , quienes pretenden soltarlo nuevamente para que los perros lo destrocen.

La actitud de Agustín Mantilla al decir que la visita que hizo a Vladimiro Montesinos no fue por iniciativa propia, aparentemente puede ser una maniobra abierta, predecible, pública, puede ocultar intenciones ocultas, sorpresivas y hasta un tanto secretas.

La primera explicación que se me cruza por la mente es que su actitud puede responder a las últimas citaciones que le ha hecho la Fiscalía que después de seis años de investigación( fiscal especial Julio Cordero Bautista) denunció al ex ministro del Interior del primer gobierno aprista Agustín Mantilla Campos por homicidio calificado, como organizador y jefe del comando paramilitar Rodrigo Franco. Junto a Mantilla fueron denunciados nueve presuntos integrantes del referido grupo paramilitar: Jesús Ríos Sáenz "Chito Ríos", Jorge Huamán Alacute, Augusto Calleja Carrasco, Carlos Farfán Yacila, Gino Fiori Gonzales, el mayor PNP (r) Walter Lauri Morales, Enrique Melgar Moscoso, Juan Pampa Quilla y Oscar Urbina Sandoval. A todos ellos se les atribuye haber cometido delito de homicidio calificado en agravio de los dirigentes mineros Saúl Cantoral Huamaní y Consuelo García Santa Cruz, el abogado prosenderista Manuel Febres Flores y los militantes del MRTA Luis Pasache Vidal y Sócrates Porta Solano.

La denuncia fue presentada a mediados de diciembre ante un juzgado especializado del Poder Judicial, donde, pese a la huelga de los servidores auxiliares, se habría avanzado con el estudio y análisis de la denuncia fiscal

Agustín Mantilla no quiere volver a pisar nuevamente la cárcel, esos espacios lúgubres que se han convertido en “depósitos de la miseria humana “.

Estuvo abocado en los últimos tiempos, desde la comodidad de su hogar en Pueblo Libre, abierto a todos sus amigos, a liderar una corriente diferenciada dentro del propio partido aprista.

Porque es un hecho que “Don Agustín” tiene amigos en el Apra y contactos fuera del partido que no lo consideran un apestado.

Le estaba agarrando el gusto a la publicidad y en muchas de sus declaraciones a la prensa , él mismo daba entender que se sentía un hombre de partido , pero sin partido y fuera del partido .

Cultivaba una imagen clásica del exiliado e intentaba convertir un pasado en un futuro, acumulando fuerzas para un probable retorno triunfal y las puertas cerradas del Apra no podían impedir que Mantilla haga política o cosas parecidas , en algún otro espacio , iba camino de convertirse en una leyenda urbana ambulante, en una de las versiones es un libero que orbita en torno al Apra , acumulando fuerza para un retorno triunfal.

Pero algo ha sucedido que lo ha hecho explotar emocionalmente, romper su habitual equilibrio y eterna espera .

Algo ha sucedido para que tome la decisión de contarlo todo o amenaza con revelar un secreto a voces que lo convirtió en el eslabón oficioso clave entre Vladimiro Montesinos con el APRA.

La respuesta es simple: infraternidad y deslealtad.

Siente que sus amigos o compañeros lo han abandonado y lo dejan solo para que solucione sus problemas judiciales que son de nunca acabar .

Se pensaba que estaba protegido y temido por el aparato oficial aprista para que no revele el secreto a voces , que no revele al mundo lo que conoce sobre sus ex compañeros , que cuando fue a conversar con Vladimiro Montesinos a la salita del SIN y recibió los US $ 30,000 dólares, Jorge del Castillo y Salinas lo sabían , que se convirtió en un eslabón clave entre el ex asesor presidencial con el partido no por propia iniciativa .

Mártir de la causa aprista.

“Don Agustín”, como es llamado por sus amigos , se considera una suerte de mártir de la causa aprista y entre sus íntimos, explicaba su acercamiento a Montesinos como un sacrificio por arreglar las cosas entre el fujimontesinismo, el Apra, y un Alan García judicialmente perseguido y físicamente exiliado.

Pero la aparición de un video y una cuenta bancaria afectan la versión altruista de los hechos.

No se sabe que García haya tenido algo que ver con esas gestiones. Pero lo concreto es que tuvieron que caer Montesinos y Alberto Fujimori antes de que García pudiera volver al Perú, y Mantilla quedó meciéndose en la red de su propia iniciativa. Estaba quemado en grado suficiente para volver a la política aprista formal

Quizá “Don Agustín” no era propiamente el leproso como el mismo , a veces, se consideraba y así lo hacía conocer a sus amigos que iban a visitarlo pensando que todavía manejaba hilos invisibles en el APRA, pero su quemada era de grado superlativo como para bloquearle el camino de vuelta a la política aprista formal (nunca iba a poder regresar entre los vivos como Javier Valle Riestra).

Eso a cada rato lo pregonaban los dirigentes nacionales del Apra .

Personalmente, nunca le perdoné que le haya extendido un certificado de buena conducta a “Kutrin” cuando éste sujeto, estando como director general de la PNP, aprovechó la situación en que “Don Agustín” se encontraba preso y había sido trasladado al Hospital de Policía para un chequeo .

En la carta que firmó “Don Agustín” a favor de “Kutrin” , aclaraba que nunca el gobierno aprista lo defenestró por su vinculación con “ El Padrino”(Reynaldo Rodríguez López”.

Este gesto noble pero interesado de “Don Agustín “ le valió para quedarse un tiempo más en el Hospital de Policía .

Huérfano de seguridad, amor y respeto por la dirigencia aprista.

En los últimos tiempos, “Don Agustín “ ha estado huérfano de seguridad , amor y respeto de la dirigencia aprista .

Estaba pasando por momentos difíciles , pero no lo aparentaba, sentía que abundaban las ofertas de traición , inmerso en interminables procesos judiciales por violación de derechos humanos, procesos que nunca acaban , uno se va de este mundo y este tipo de procesos te persiguen implacablemente , de manera infinita.

“Don Agustín “ , al no encontrar lealtad, auténtica amistad, confraternidad en la cúpula aprista simplemente ha explotado, dejando atrás sus miedos y estoy seguro que hoy se siente liberado .

Quizá lo que no ha calculado es que la “ prensa piraña” que vive del culebrón político, atizará el fuego y al final, él será el único perdedor porque cuando el hombre abre la boca, se juzga a sí mismo.

Agustín Mantilla ha perdido el camino de la sensatez pero va camino a ser verdadero y la culpa la tiene Manuel Gonzáles Prada cuando gritaba : ¡ Seamos verdaderos! Rompamos el pacto infame y tácito de hablar a media voz...venga la verdad con su desnudez hermosa y casta... seamos verdaderos , aunque la verdad cause nuestra desgracia ; con tal de que la antorcha ilumine , ¡ poco importa si quema las manos que la enciende y agita !