El general PNP (r) Miguel
Hidalgo, ex ministro del Interior se pronunció respecto al tráfico de
combustibles en la PNP y sostuvo: “Cuando se presenten este tipo de casos,
deben darse sanciones realmente drásticas”.“Esta situación afecta mucho el
servicio policial, pues los vehículos no cumplen su función en las zonas donde
deberían patrullar”, añadió.
Luego de leer estas líneas, algunos ciudadanos enervados por
este nuevo caso de corrupción habrán coincidido y suscrito los categóricos
argumentos del ex DIRGEN, extrañando su eficacia espartana y abnegada gestión
en el comando institucional.
Pero debo decirles que sus declaraciones colisionaron con mi
memoria que felizmente, aún conserva una aceptable integridad neuronal.
¿Díganos Teniente General PNP Miguel Hidalgo: ¿usted no fue
el que utilizo el carro del Estado y concurrió a un hotel de mala muerte con
una dama que no era su esposa, y fue exculpado de responsabilidad gracias a la
confabulación del Tribunal Militar Policial - Militar quien lo absolvió; hoy
con que moral usted indica que: “cuando se presenten este tipo de casos, deben
darse sanciones realmente drásticas”.
Díganos usted, ¿El carro con el que concurrió al hotel
cumplía su función para lo que fue designado?; díganos, a Usted ¿ Lo
sancionaron dramáticamente por mellar la imagen de la Policía Nacional del
Perú, pese que ostentaba el cargo de Director General de la PNP?. Claro que no,
en cambio lo premiaron por que después fue Ministro del Interior.
Considero que todo policía decente y honorable, tiene hoy la
gran oportunidad de deslindar con todos aquellos que traicionaron el juramento
de servir a la sociedad. Todo policía, tenga el grado que tenga y quebrante su
compromiso de proteger a la persona humana, sometiéndose y subordinándose al
poder, dinero o placer, no es digno de serlo y debe merecer el rechazo que la
sociedad acuerda para la personas sin honor.
Luis Alberto Toribio Paulino
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