martes, 21 de abril de 2009

El rescate de los rehenes en la embajada japonesa

12 años después de una de las operaciones militares de rescate de rehenes más brillantes de la historia mundial.

“Ve a decirles a todos los peruanos que hemos muerto para defender su sagrado derecho a vivir en paz".

El 22 de abril de los corrientes se cumple doce años del rescate de los rehenes de la residencia japonesa ( 22 de abril 1997), una de las operaciones llevada a cabo por comandos de las FFAA que constituye una de las operaciones de rescates más perfectas de la historia , no sólo por la precisión matemática en su ejecución sino también por el costo en vidas humanas que fue el mínimo.

Siempre nos resulta ser justos cuando se trata de dar reconocimiento a nuestros semejantes ya que anteponemos intereses, prejuicios, sentimentalismos, y hasta frustraciones personales, evadiendo con ello, esa sencilla pero significativa aceptación del valor que tiene lo hecho o logrado por un grupo humano, en este caso, un grupo élite de las FFAA peruanas.

Esta acción demostró la altísima capacidad operativa de las fuerzas armadas y de la policía nacional del Perú, que

para algunos analistas internacionales superó la hazaña de Entebbe, realizad por los comandos israelitas.

Cada comando que ingresó a la residencia japonesa donde estaban los rehenes sirvió de escudo humano para proteger la vida de cada uno de ellos.

En esas circunstancias murió el Coronel Juan Valer Sandoval, quien cumplía el sagrado deber que se le había encomendado, hecho corroborado por su conmovedora carta que pinta de cuerpo entero a un soldado de la Patria, que viste el uniforme de Bolognesi.

Exposición del material emerretista incautado el 22 de abril de 1997 durante el operativo Chavín de Huántar realizado el 22 de abril de 1997 por las Fuerzas Especiales (FFEE) de las Fuerzas Armadas .

La audaz operación de rescate liberó 72 rehenes que habían permanecido cautivos 136 días en la residencia del embajador del Japón en Lima, Morihisa Aoki, tras la toma perpetrada por el MRTA el 17 de diciembre de 1996.

Durante el rescate murieron dos oficiales del Ejército, el vocal de la Corte Suprema Carlos Giusti y 14 emerretistas responsables del secuestro.

La civilidad también dio su cuota de sacrificio en la figura del probo magistrado Carlos Giusti Acuña, quien falleciera en momentos en que era socorrido como consecuencia de una bala terrorista.

El 22 de abril de cada año significa un día de alianza entre la civilidad y las FFAA y parafraseando la epopeya del gran Leonidas en las Termo pilas pueden decir los mártires de esa epopeya nacional:

" Ve a decirles a todos los peruanos que hemos muerto para defender su sagrado derecho a vivir en paz".

Gloria a los héroes del 22 de abril.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Operación Chavín de Huantar, orgullo para nuestro Perú.
Los emerretistas también eran humanos con derechos pero los perdieron al ir por encima de los derechos de aquellos a quienes tomaron por rehenes.
Tomar emerretistas prisioneros,¿para qué?, para que pasen en carcel unos años y luego estén libres como Berenson y muchos otros que ya cumplieron su "justa condena".