El escritor inglés Roger Wolfe tenía un curiosa definición del “oficio más hermoso del mundo” como lo llamó ‘Gabo’: “Periodismo: lanza la mierda y lávate las manos”. Lamentablemente, algunos medios de comunicación parecen esforzarse para darle la razón al referido novelista. Medios cuyo accionar provocarían la vergüenza de Ryszard Kapuściński, en caso estuviera vivo.
Caretas denunció tanto en su edición de hoy como en la del jueves pasado que en Juez Justo se le está haciendo una campaña de desprestigio, como si sus páginas no se prestaran para lanzar barro a todo aquel que ha osado en denunciarlos por las informaciones a medias que publican, o por los insultos que acostumbran a usar a diestra y siniestra.
El 9 de julio el coronel Benedicto Jiménez Bacca, director fundador de la revista Juez Justo, presentó una nueva querella en contra de Marco Zileri y Américo Zambrano, director y editor de investigación de Caretas, por el delito contra el honor – difamación. Este reciente proceso, no es parte de un “ataque” gratuito como ellos aseguran, es una simple acción en legítima defensa.
En su edición 2290 la revista Caretas publicó un informe firmado por el periodista Américo Zambrano en el que se insulta a Jiménez. “El programa Juez Justo que conduce el malogrado policía Benedicto Jiménez en Radio San Borja, estrena nuevo conductor” dice uno de los párrafos escritos. ¿Con qué autoridad moral puede Zambrano juzgar de “malogrado policía” al exjefe del Gein? Seguramente ha olvidado que hace unos años su colega, Paola Ugaz, lo desenmascaró tras descubrir que le pedía dinero a una de sus informantes.
Luego también escribe que “hace cuatro meses, una fuente confiable contó a Caretas que fue convocado por un fotógrafo a una reunión a la que asistieron otras dos personas que comentaron estar buscando la dirección de Zambrano para darle una golpiza por orden de Orellana y Jiménez”. Líneas más abajo concluye diciendo que le brindó la dirección de su casa al supuesto informante que quería saber dónde ubicarlo para darle un escarmiento. Es insólito creer que a sabiendas de las intenciones de esta persona, Américo Zambrano haya accedido a darle su dirección, pero es mucho más aberrante la acusación que hace en contra de Benedicto Jiménez, sin tener pruebas para hacerlo.
Hasta el momento son cinco las querellas en contra de Marco Zileri y Américo Zambrano que se procesan en diferentes juzgados penales de Lima, la presentada hace dos días es la sexta. Este rosario de juicios es muestra de la conducta reiterativa y habitual de los querellados en este tipo de delitos. Basta de engañar a sus lectores, señores de Caretas. Basta de hacer honor al nombre de su revista y mostrarse ante la sociedad como un medio de comunicación independiente y veraz. Cada vez la gente les cree menos, no lo olviden.
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