Mientras el general Israel Ziv se preparaba para suscribir el hoy cuestionado contrato con el Comando Conjunto, tenía a un ex ministro aprista trabajando para su compañía en Guinea.
Israel Ziv, fundador y presidente de la empresa israelí Global CST (izq.) y Hernán Garrido Lecca, ex ministro aprista.
Por Gustavo Gorriti.-
El lunes 24 de agosto de 2009, Mirko Lauer publicó en su columna diaria en La República una“carta de Conakry”. Quienes leen a Lauer saben que periódicamente este cede su columna a invitados, para que estos expresen su voz y para descansar él la suya. Esta vez el corresponsal desde el continente misterioso era el ex ministro aprista Hernán Garrido Lecca.
¿Qué hacía Garrido Lecca –fresca aún su presencia en la memoria de la gente por su paso proceloso a través de la administración pública– en Conakry? Es cierto que la capital de Guinea no llega a tener el atractivo romántico de, digamos, Tombuctú, pero sí transmite esa suerte de equívoco exotismo que no solo hace pensar en los dorados crepúsculos de un safari fotográfico, sino también en, digamos, diamantes de sangre, minas depredadoras, caudillos corruptos, pueblo sufriente.
El ex ministro no lo dice en su carta, que tiene apuntes interesantes sobre nuestras raíces afroperuanas cuyo “origen más remoto” está “en Guinea”. En su ‘carta’, afirma que el “gobierno de Guinea ha convocado a elecciones democráticas (…) y se ha propuesto llevar adelante un ambicioso proceso de reformas. Viene estudiando un agresivo programa de electrificación rural y un Programa de Agua para Todos”.
Garrido Lecca y Agua para Todos en Conakry… Nadie puede decir que África no es alucinante.
La razón de la presencia del ex ministro en Guinea era un trabajo de consultoría para el gobierno de ese país. Lo interesante es saber qué compañía lo contrató.
Es una empresa cuyo nombre resuena estos días en el Perú.
Se trataba de Global CST (las siglas significan ‘Comprehensive Security Transformation’), la compañía dirigida por el general de brigada, en retiro, de las Fuerza de Defensa israelíes, Israel Ziv.
En esa fecha, en Lima ya se habían hecho los contactos y estaban en curso las negociaciones para el contrato entre el Comando Conjunto de la FFAA y la empresa Global CST, de Ziv. El contrato que ahora ha sido denunciado por la Contraloría ante el Ministerio Público, se firmó el 20 de octubre.
Coincidentemente, Garrido Lecca se encontraba trabajando en una consultoría de alto rango para esa misma compañía. Empresa que él había presentado unos meses antes al Ejército.
En efecto, a finales de abril de ese año, Hernán Garrido Lecca acompañó al general Israel Ziv en una visita al entonces comandante general del Ejército, general EP Otto Guibovich.
Fuentes con cercano conocimiento de la gestión del general Guibovich, hoy en retiro, informan que en esa reunión, el general Ziv ofreció los servicios que, meses después, serían tomados por el Comando Conjunto. Inicialmente, dicen las fuentes, Guibovich se entusiasmó por la propuesta. Al preguntarles sobre el costo a sus visitantes, le dijeron que iba a ser de “tres millones”. Eso le pareció un precio adecuado, dicen las fuentes. Tres millones de soles por un entrenamiento masivo no estaba mal.
Pero había una pequeña equivocación, le dijeron los visitantes. No eran tres millones de soles sino de dólares. Entonces Guibovich les dijo, refieren las fuentes, que él no disponía de ese monto para ese ejercicio presupuestal. Ahí acabó la reunión.
¿Fue Garrido Lecca el personaje central entre quienes hicieron lobby a favor del contrato con Ziv? Fuentes familiarizadas con el pensamiento del ex ministro de Vivienda y de Salud, lo niegan enfáticamente y sostienen que Garrido Lecca no conoce “a Contreras”, que no ha estado en “ninguna reunión con Ziv en el Comando Conjunto, ni en ninguna gestión”.
Con la excepción, por supuesto, de la reunión con Guibovich, que fuentes vinculadas con el ex ministro y el ex comandante general, reconocen que sí tuvo lugar.
Si tal fuera el caso, ¿qué pasó entre el Pentagonito y el Comando Conjunto, que el entrenamiento que en un lado se ofreció por tres millones de dólares terminó pagándose, con adenda incluida, por 40 millones de soles, que al cambio actual bordea los 15 millones de dólares.
Aparte de Garrido Lecca, ¿quiénes más influenciaron para que se diera una suscripción del contrato en los términos que la Contraloría ha denunciado ahora ante el Ministerio Público?
En el año 2009, Global CST estaba en camino de culminar un ambicioso proceso de expansión.
Este se inició años antes, el 2006, y sobrevivió una poco afortunada –por lo menos en cuanto a resultados– experiencia en Georgia, que concluyó con los duros reveses que sufrieron los militares de esa nación a manos del ejército ruso.
En compensación, en el otro lado del mundo, Global logró un importante contrato para asesorar las Fuerzas Armadas colombianas, en la lucha contra las FARC.
El entonces ministro de Defensa y ahora presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, contó que su primer contacto con Global CST y con Ziv fue a través del excanciller israelí Shlomo Ben Ami, el prestigioso historiador que sirvió con altibajos en el gobierno laborista de Ehud Barak. Ziv, a su turno, tuvo y mantiene una relación cercana con Barak.
Especialista en historia española, Ben Ami es vicepresidente del Centro Internacional para la Paz de Toledo. Allí contactó a Santos con Ziv.
A partir de agosto de 2007, Global CST llevó a cabo un programa intenso de entrenamiento a la Fuerza Armada colombiana, ya robustecida a través del Plan Colombia.
La exitosa operación de rescate de Ingrid Betancourt, así como otras acciones más cruentas y controvertidas –como la muerte del dirigente FARC Raúl Reyes en suelo ecuatoriano– fueron en parte atribuidas a la influencia y entrenamiento de Global CST. Ello representó una buena publicidad para la compañía, pero también una sorda y fuerte oposición del gobierno de Estados Unidos.
GARRIDO LECCA COBRÓ S/. 369 MIL
El programa “#Esnoticia” reveló los pagos que Hernán Garrido Lecca recibió de Global CST. Según la información, el amigo de Alan García cobró por lo menos cuatro pagos. El primero se registró el 14 de diciembre de 2009, el mismo año en que se iniciaron todas estas movidas, por S/. 162 450. El segundo pago, el 19 de abril de 2010, por la suma de S/. 34 672. El tercero se concretó el 22 de junio de ese mismo año por S/. 64 888, al igual que el cuarto, que se realizó el 11 de agosto por S/. 107 109. Estas son las cifras que se conocen y que en total suman S/. 369 119 a favor de Garrido Lecca.
Según la información revelada, el 4 de enero pasado, la comisión que investiga las supuestas irregularidades que se habrían cometido durante el gobierno de Alan García le preguntó en sesión reservada al exministro aprista si había efectuado servicios para empresas extranjeras. Este solo respondió que hizo consultorías para el gobierno de Guinea.
También le preguntaron si sabía que Global CST había contratado con el Estado o con el Ministerio de Defensa, a lo que Garrido Lecca respondió que “probablemente”. Pero, eso sí, aclaró que él no había tenido nada que ver con contratos concernientes al Perú.
Si Garrido Lecca hizo las gestiones a favor de Global CST en abril de 2009 ante el exjefe del Ejército Otto Guibovich, ¿también lo hizo ante el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas? La pregunta es válida porque finalmente esta entidad terminó firmando el contrato con la empresa israelí por la increíble suma de S/. 42 millones.
HABLA HOYOS
Al ser consultado al respecto, el general en retiro Rafael Hoyos de Vinatea, comandante de la Región Militar del Centro en los años 2005 y 2006, y en ese entonces a cargo de las zonas del Huallaga y el VRAE, aseveró que la contratación de la empresa israelí no obedeció a criterios castrenses.
Hoyos de Vinatea duda que el general Francisco Contreras Rivas, quien firmó finalmente el contrato con Global CST en su calidad de jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, haya tomado la decisión de contratar a dicha empresa. “No creo que su Estado Mayor Conjunto, sea de la Fuerza Aérea o del Ejército, le haya dicho: ‘Hay que traer a un general israelí como prioridad número 1 para poder combatir en el VRAE’. Y más el costo. Fíjate, nueve millones de dólares. Yo soy general de División, estamos bordeando los S/. 7 500 (mensuales). Sacando números, nueve millones de dólares es el sueldo de todos los generales de las Fuerzas Armadas y de la Policía Nacional durante un año”, señaló a “#Esnoticia”.
GUSTAVO GORRITI
IDL Reporteros
No hay comentarios.:
Publicar un comentario