lunes, 10 de enero de 2011

Ketín Vidal ¿Jale de lujo o el brillo del oro falso?


Por Víctor Manuel Castillo Sánchez.

Hubo un tiempo en que el Perú creyó haber encontrado un héroe. Alguien que encarnaba las virtudes que tanta falta hacen para generar la convicción de que somos mucho más que la podredumbre que nos gobierna.

Ese hombre era Ketín Vidal. Su nombre e imagen quedaron grabados el día de la captura del sanguinario jefe de la peor banda criminal que haya azotado a la sociedad peruana. El Perú quiso creer que por fin habíamos hallado al paradigma de ciudadano: un hombre honesto, leal y valiente. Un cerebral oficial cuya corrección traslucía lo mejor de la institución policial.

Sin embargo, el trabajo de un periodista desnudó la farsa.

Kevin Vidal fue nada más y nada menos que el hombre de Montesinos, su amigo, su compañero, su soplón, su deudor y su cómplice. Gracias al ascendiente e influencia de Montesinos Ketín Vidal escaló y su intervención en el histórico episodio de la captura de Abimael Guzmán se debió a que tenía el rol de infiltrarse en el Grupo especial encargado de la captura de Abimael Guzmán y en realidad, los verdaderos héroes fueron los integrantes del GEIN, a quienes se les debe el reconocimiento y la gloria y ésa es una deuda pendiente que no debemos olvidar todos los que amamos al Perú y a quienes lo hacen más grande.


Más tarde, como lo que era, esto es, un falso héroe, aprovechó de su poder e influencias para despojar a un hombre honrado de un terreno, es decir, le robó parte de la vida que dicho hombre invirtió en un lote de lo que sería su hogar. Agreguémosle ya antes había violado el innombrado código policial que dice “no robarás la mujer a tu prójimo”. Del mismo modo como David abusó de su poder para que Urías el hitita muriera en el campo de batalla para poder disfrutar de su mujer, del mismo modo Vidal había usado de sus influencias para que un subalterno fuera alejado de su hogar y así él pudo disfrutar de las caricias de la mujer del desventurado.

También fue Vidal un conocido y próximo a Reynaldo Rodríguez López, el famoso narcotraficante del caso Villa Coca, asiduo concurrente junto a otros oficiales de una corrompida institución policial, de la agencia de viajes “Senturín”, de propiedad del narcotraficante.

En fin, el periodista descubrió que la efigie que se había construido alrededor de Vidal no era a fin de cuentas, sino otra gran mentira de la gran pandilla que tuvo sometido al Perú y a sus principales instituciones.

----- mensaje añadido, 22-dic-2010 a las 08:54 -----

Ketín Vidal amenazó con enjuiciar al periodista Carlos Paredes, pero como éste valiente hombre de prensa expresó, hasta el día de hoy le espera con los documentos y expedientes que ha logrado acumular y que llevaron a que su trabajo “La caída del héroe. La verdadera historia de Ketín Vidal” gane el premio de la Fundación para un nuevo periodismo Iberoamericano –presidida por Gabriel García Márquez-, un importante galardón que tiene el mérito de permitirnos a la sociedad peruana descubrir la verdad.

De ahí que no nos debe extrañar que el mentiroso que dijo que no era padre de Zaraí y que tuvo que reconocerla como una forma de escapar a la acusación constitucional por reunirse a escondidas con el Vocal Silva Vallejo, ha recurrido a otro mentiroso, para juntos así construir una nueva y mayor mentira: que esta vez hará lo que no hizo en su primer gobierno.

El verdadero lujo que tenemos es a un periodista como Carlos Paredes que, contra la marea de prestigio unánime que súbitamente alcanzó a Vidal, simplemente hurgó en el pasado de ese ídolo con pies de barro, para ofrecer a la Sociedad peruana una sencilla y clara verdad: Ketín Vidal no es un héroe, ni un hombre íntegro. Ese hombre no está a la altura de la imagen que se ha construido alrededor de él.

Conciudadanos: más que aplicar el refrán “Dime con quien te juntas y te diré quien eres”, pensemos que lo más apropiado es decir que “Dios los cría y ellos se juntan”.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Este artículo es una tontería y veneno puro, pues si Ketín Vidal fue amigo y títere del 'Doc', ¿cómo se explica su captura por parte de dicho general? Nadie captura a su amigo para someterlo a una dura prisión de la Base Naval. Creo que por ahí no va la cosa. Vidal es, con todo su 'pecados' y 'pecadillos' un símbolo nacional contra asesinos y ladrones de la calaña de Guzmán y Vladimiro. Pueden calumniarlo, pero la mayoría del país siempre estará a su favor. Saludos.