Las organizaciones dedicadas al narcotráfico transportan la droga hacia la costa. Esto favorece a los terroristas, quienes les cobran altos cupos.
Las últimas informaciones de Inteligencia señalan que una columna proveniente del VRAE se ha trasladado al Alto Huallaga y es la responsable de los últimos ataques en esa zona. Esta versión echa por tierra lo que ciertos analistas sostienen sin mayores pruebas y aparece un nuevo escenario que es necesario analizar con cuidado.
| Benedicto Jiménez | Revista JUEZ JUSTO
Algo ha cambiado en el Alto Huallaga. Todas las entidades de Inteligencia, tanto del sector Interior como Defensa, coinciden en señalar que en la zona existe un grupo armado procedente del VRAE que sería responsable de los últimos atentados en Tocache.
Estas afirmaciones se sustentan en el hecho de que el accionar itinerante de Florindo Eleuterio Flores Hala “Artemio” se ha venido circunscribiendo a la margen izquierda del río Huallaga, principalmente en los valles de Yanajanca-Paraíso, Alto Huánuco, Mólope, Magdalena y Alto Corvina-Venenillo, que están lejos de los parajes donde se perpetraron los atentados más recientes.
Los informes señalan que resulta inexacto que el grupo “artemista” se trasladó a Bambamarca durante el primer trimestre de este año, como lo sostiene el analista Jaime Antezana Rivera en sus continuas apariciones mediáticas.
Al contrario, está debidamente probado y documentado que, entre el 15 y el 19 de junio, “Artemio” se desplazó por otras localidades de la provincia de Tocache, persiguiendo al grupo armado proveniente del VRAE y, a su paso, realizó pintas de rechazo a la ideología de los seguidores del camarada “José”.
“Artemio” debilitado
Lo evidente es que la facción liderada por “Artemio” se ha visto debilitada por el accionar contraterrorista desplegado en el Frente Policial Huallaga. Desde el 15 de julio de 2010, no se conoce de alguna acción de propaganda armada por parte del grupo de Artemio y desde el 1 de mayo no se comete asesinatos selectivos. Esto debido principalmente a las operaciones policiales que causaron muchas bajas a los “artemistas”.
Los golpes al terrorismo en esa zona no han sido pocos en los últimos meses. El 20 de mayo de 2010 cayó abatido el cabecilla senderista Víctor Raúl Vásquez Santa Cruz, “Rubén”; entre el 8 y 31 de agosto de 2010 se desarticuló el grupo armado de Mario Antonio Sifuentes Sandoval, “Sergio”, con la captura de sus integrantes e incautación de armamento de guerra.
El 13 de octubre de 2010, la Policía también capturó a Edgar Nicanor Mejía Asencio, “Izula” o “Maycol”, y el 18 de octubre detuvo a Teodoro Penalillo Carmen, “Rayo”. Eso permite deducir a las fuerzas del orden en el Huallaga que los grupos armados de la facción de “Artemio” se encuentran en recomposición y se han desplazado a lugares distantes de la zona del ataque alevoso contra el personal de la Dirandro-Corah en el sector Guacamayo, ocurrido entre los días 5 y 7 de noviembre.
Este detalle trae abajo la tesis de Jaime Antezana Rivera, quien sostiene que el camarada “José” y sus huestes no se están desplazando hacia el Huallaga.
Proseguir
Las capturas continúan, aún cuando algunos creen que, mientras no se llegue a “Artemio”, estas son solo un engaño que busca tranquilizar a la población.
Antezana no ha revisado la entrevista al camarada “José” difundida en el programa “Punto Final” de Frecuencia Latina el 31 de mayo de 2009, en la que se escuchan las consignas de la facción “Proseguir”, liderada por los hermanos Quispe Palomino.
Allí, los entrevistados afirman que se debe expandir y consolidar las bases de apoyo democráticas revolucionarias, conquistar el poder en todo el país para el pueblo y la revolución peruana. Al final, dan vivas a la guerra popular democrática y prolongada.
Las consignas se dan para cumplirlas y lo que están haciendo el camarada “José” y sus huestes terroristas es cumplirlas. Han desplazado un grupo armado conformado por unos doce combatientes (un pelotón), aproximadamente, al mando del camarada “Roberto” hacia el Alto Huallaga, zona conocida como “CRO-Comité Regional Oriental”. El grupo se ha asentando en el distrito La Pólvora, provincia de Tocache.
Reportes de Inteligencia señalan que la columna armada de avanzada del VRAE se desplaza por sectores agrestes limítrofes con el departamento de la Libertad, donde las organizaciones dedicadas al narcotráfico transportan la droga hacia la costa. Esta situación favorece a esa columna porque les permite agenciarse de dinero producto del cobro de cupos para la sobrevivencia del grupo armado.
La tesis del desplazamiento de las huestes del camarada “José” hacia el Huallaga se corrobora con la detención de Agapito Guerrero Guerrero “Bigote” (encarcelado por terrorismo), ocurrida el 21 de mayo de 2010 en la zona conocida como Nuevo Horizonte, precisamente en La Pólvora. Tenía en su poder documentación relacionada a la facción “Proseguir” y un revólver. Este sujeto había estado brindando apoyo logístico al grupo armado liderado por el camarada “Roberto”.
Informaciones de Inteligencia revelan que el grupo armado de “Roberto”, procedente del VRAE, es el responsable de las acciones terroristas ocurridas entre los días 5 y 7 de noviembre contra el personal de la Dirandro-Corah.
Lo que está haciendo este pelotón del VRAE es crear bases de apoyo (en acatamiento a sus consignas) y erigirse como “defensores del campesinado cocalero”, desplazando a la facción acuerdista de “Artemio”.
Antezana se equivoca cuando dice que “alguien administra las capturas” y, sobre todo, cuando sostiene que “hasta que no se produzca la detención o abatimiento de ‘Artemio’, las capturas serían solo una forma de engañar a la población”. Desconoce que la Dircote viene ejecutando el plan estratégico 2007-2011, destinado a la desarticulación de la facción del Alto Huallaga.
“Artemio” ha reducido su accionar delictivo debido a las operaciones contraterroristas policiales realizadas en el Frente Policial Huallaga, pero ha surgido otra columna procedente del VRAE.
Los resultados en la lucha contraterrorista en el Alto Huallaga son garantía para que el comando del Frente Policial Huallaga continúe dirigiendo la lucha contra el terrorismo, pero, mejorando o buscando la unificación de criterios y óptimos niveles de coordinación con todas las entidades de Inteligencia, tanto del sector Interior como de Defensa, acantonados en la jurisdicción del Alto Huallaga.
Y, de paso, desplazar a los mejores analistas y agentes de inteligencia al VRAE -como están haciendo los terroristas- para apoyar en la lucha a quienes están a cargo de dicho frente.
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